El Wunderkammer del Castillo Sforzesco

Primero debemos aclarar lo que es la palabra alemana "Wunderkammer". Literalmente significa "Cuarto de las Maravillas". Y es justamente esto, una habitación llena de objetos extraños que provienen de todas partes del planeta. Creados entre el siglo XVI y XVII por personas nobles que estaban interesadas ​​en el conocimiento humano y trataban de guardar todo lo que les despertaba curiosidad. En efecto, en ellos se puede encontrar objetos naturales como piedras, animales disecados, fósiles, artefactos de diferentes culturas, incluso, instrumentos científicos rudimentarios y no faltan también obras de arte, libros y mucho más. Desde luego, no están desprovistos de objetos de vanguardia. Entonces, si sois realmente curioso desearéis ver con vuestros ojos un "Wunderkammer". Es fácil: basta ir al Castillo Sforzesco, que no le falta nada. Y en la sección de las Artes Decorativas se puede apreciar un “Wunderkammer”, que es la colección de objetos del Museo de Manfredo Settala, un gran coleccionista de Milán, del siglo XVII. Entre los objetos que ciertamente os sorprenderá hay un autómata que se remonta al siglo XVII . Es, en efecto, un verdadero prototipo de nuestro robot . Tiene la cabeza de diablo con ojos muy abiertos y orejas puntiagudas. En la boca, que está abierta, resaltan los dientes y la lengua de color rojo. Su cuerpo es musculoso, así como los brazos que esconde detrás de su espalda. No tiene piernas, ya que en su lugar hay una caja que contiene el mecanismo que lo pone en movimiento. La palanca para arrancarlo está ahí delante de nuestros ojos, en la parte frontal de la caja. Y, en verdad, nos da ganas de accionarla para ver si este “autómata diablo” es realmente espantoso como parece.